¿Buscas el lugar perfecto para tu retiro, taller, workshop o encuentro?
Ven a visitarnos.
Bienvenido al Centro Movimiento Integrador, un lugar único en pleno corazón de la naturaleza, ideal para reconectar, inspirar y transformar tu experiencia. Tenemos la siguiente infraestructura.
EL DOMO
El Domo es el alma de nuestro centro: con 12 metros de diámetro, una altura de 6 metros, y 113 m² de superficie de trabajo. Cuenta con una terraza de 40 m². El domo tiene aislación térmica, lo que garantiza privacidad, buena temperatura y tranquilidad en todo momento. El suelo esta recubierto con tatamis que se desmontan, listo para adaptarse a todo tipo de actividades. Además posee sillas, parlante, y un proyector con pantalla ideal para presentaciones. También disponemos de columpios, telas, colchonetas y un colchón olímpico.
Las instalaciones anexas al domo incluyen 2 baños secos con la tecnología “EMUH” que aseguran una higiene total. Una kitchenette completamente equipada para preparar colaciones y coffe breaks.
Alojamiento
El ala trasera comprende dos grandes espacios con un baño completo. Espacio 1: dos camarotes y una cama. Espacio 2: tres camarotes.
La casa central ofrece cómodas opciones de hospedaje: un dormitorio con 2 camas con acceso al baño de visitas. Un loft con un balcón vista al cerro el roble con 4 camas y baño privado. La casa central, además, ofrece un amplio salón, comedor y cocina y una terraza de 35 m2. con muebles y comedor exterior.
La naturaleza
Estamos en Caleu (sector el LLano), una joya escondida en la Cordillera de la Costa. Esta zona protegida forma parte de la reserva Campana-Peñuelas, declarada patrimonio de la biosfera debido a su invaluable bosque esclerófico. Se encuentra a más de mil metros sobre el nivel del mar y a tan solo 75 minutos de Las Condes, Santiago. Las vistas privilegiadas de cumbres como El Roble, El Garfio, El Pololo y muchos otros cerros dejan sin aliento.
El circuito Ca-Leufú Mahuida, que recorre diez cerros, es un paraíso tanto para los aficionados al trekking como para aquellos que simplemente buscan desconectar, relajarse y sumergirse en la naturaleza. Aquí, el aire es inmaculadamente puro, libre de contaminación, y las noches despejadas se convierten en un espectáculo celestial, donde miles de estrellas titilan a lo lejos.
Con algo de suerte, podemos avistar majestuosos cóndores que viajan desde la Cordillera de Los Andes hacia la Cordillera de la Costa. También es posible ver zorros, el tucuquere vigilante desde el quillay, conejos, familias de codornices, colibríes y hermosas y tranquilas culebritas con las que convivimos amorosamente en su hábitat natural.